miércoles, 17 de febrero de 2016

LA PRÓXIMA Y CERCANA ESCOLARIZACIÓN

  Nuestro nuevo reto está siendo la nueva escolarización a P3. Aunque no sea obligatoria, entendemos que es necesaria y un beneficio para cualquier niño.

  Las personas ciegas leen braille, las personas mudas con lengua de signos, y los niños con autismo son aprendices visuales. La mayoría necesita de imágenes para hacer más entendible una materia, para estructurar su día a día. No tiene sentido del tiempo, por ello hay que enseñarles y tienen que aprenderlo.

  Existen colegios de educación especial, donde se pueden encontrar muchísima diversidad: niños con síndrome de Down, parálisis cerebrales, ciegos, sordos y también con autismo.  Esto es una opción muy válida para algunas familias, pero Hugo y yo opinamos (después de estar por fin, muy bien asesorados) que siempre habrá tiempo de llevarlos allí. Ahora es nuestra última opción.

  Nuestro ideal, y por ello estamos luchando, es por una escolarización ordinaria adaptada (con USEE, para niños con necesidades especiales).
  Lo cierto, es que hace tiempo parecía impensable que los niños con TEA pudieran aprender y funcionar de forma adaptativa en contextos de inclusión educativa. La escasa formación para poder abordar las características de este alumnado, implicaba un reto insalvable, hacia la inclusión.
  Y aunque los profesionales de la psicología y la educación son un pilar básico para la integración e inclusión, de niños con TEA en la escuela ordinaria, hoy en día siguen siendo una problemática de una triste actualidad y aunque se promueva la educación inclusiva, no es tan cierto.

Con el dolor de por sí que conlleva este diagnostico, y que a diario intentamos no trasmitir a nuestro hijo, nos topamos con una cruel realidad. En periodo de puertas abiertas, estoy viviendo situaciones bochornosas y con excusas muy diversas, desde el momento en que he comunico el diagnostico de Héctor: la habitual sugerencia (con mucha educación, eso sí) que busquemos otra escuela, debido a la carencia de medios humanos y materiales (aun promoviendo en sus páginas webs la presencia de unidades para necesidad especiales).

Una vez más el núcleo familiar se siento solo. EL CDIAP, el EAP, te sugieren dicha inclusión, pero somos los padres los que “picamos” a las puertas de esos colegios.
Por lo que me puse en contacto con la asociación Aprenem y nuevamente, me ofreció una relación de centros que  si tienen esa unidad de USEE (algunas mas recomendadas que otras, y entre ellos colegios públicos, concertados y privados.


En estos momentos estamos inmersos en este arduo camino, pero sé que conseguiremos el dictamen más acertado y necesario, para poder hacer la preinscripción de Héctor este próximo marzo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario